Casi siempre hablamos de los maravillosos beneficios que el Masaje Infantil tiene para los bebés. Pero nos olvidamos que el masaje es un medio de comunicación entre el bebé y adulto que lo realiza, donde ambos dan y ambos reciben. Es cierto que el Masaje Infantil tiene enormes beneficios para el bebé: le ayuda a relajarse, a conciliar el sueño más fácilmente, a crear un vínculo especial con la personas que lo realiza, incluso a calmar los temidos cólicos. Pero existen multitud de beneficios para el adulto que lo aplica. Observo entusiasmada cómo cada día son más los papás que se animan a asisitir a nuestros talleres, para buscar su momento con el bebé ser ellos quien lo apliquen.
Mis talleres de Masaje Infantil siempre empiezan con unos minutos de relajación, con música suave o en silencio, donde el adulto que va a realizar el masaje se toma un tiempo para aflojar las tensiones que ha ido acumulando durante el día o durante la semana. Te propongo que realices este sencillo ejercicio y observes cómo te sientes:
Tómate unos segundos para que tu respiración se vuelva mas relajada y profunda, para oxigenarte y llenarte de todo lo positivo que quieres transmitir a tu bebé y para dejar salir lo negativo que no necesitas en ese momento tan especial: prisas, preocupaciones, estrés, nervios, etc. Piensa en parar el reloj y dibujar una burbuja alrededor de tu bebé y de ti, para disfrutar del aquí y del ahora. Céntrate en la sensación de las palmas de tus manos (que tendrás suavemente apoyadas sobre tu bebé) y fíjate en la que quieres transmitir a tu bebé a través de ellas. Deja aflojar las tensiones de la palma de la mano y cada uno de los dedos, y siente qué recibes de tu bebé. Si tienes las manos lo suficientemente relajadas percibirás su temperatura, la delicadeza de su cuerpecito, el ritmo de su respiración e incluso el latido de su corazoncito. Antes de empezar el masaje piensa en lo que estás trasmitiendo a tu bebé y lo que estás recibiendo de él o ella.
Si convertimos la rutina del masaje en un momento especial, los adultos tendremos los siguientes beneficios:
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- Tendremos en nuestra mano una excelente forma de comunicación e interacción con el bebé
- Aprenderemos a detectar y responder eficazmente a los mensajes no verbales del bebé, lo que a su vez refuerza el instinto y la intuición
- Disfrutaremos de un momento de relajación y disfrute junto a nuestro bebé
- Encontraremos un valioso espacio y un tiempo de diversión muy positivos
- Favoreceremos la consolidación de lazos familiares y estrecharemos los vínculos positivos con nuestro bebé
Para hacer el masaje sólo necesitas una toalla o arrullo sobre el que tumbar a tu bebé, cojines para apoyar tu espalda y estar una posición cómoda y aceite o crema de masaje. Yo suelo recomendar aceite de caléndula, que hidrata y calma incluso las pieles más sensibles. Personalmente, las cremas no me gustan tanto para el masaje, ya que se absorben más rápido y hay que repetir su aplicación varias veces durante el masaje. Aunque hay otras opciones como leche corporal de calendula u otras cremas adecuadas para la piel del bebé. Es recomendable que sean productos de origen vegetal, que no tengan perfumes ya que estaríamos obstaculizando uno de los sentidos más desarrollados del bebé: el olfato.
[Tweet » Tu #bebe necesita el olfato para construir su vínculo. En #masajeinfantil, productos sin perfume «]
Si te gustaría empezar a practicar el masaje, pero desconoces cómo hacerlo, puede recomendarte varios libros que pueden ser de gran ayuda:
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- Masaje Infantil: Guia Práctica para el Padre y la Madre
- Masaje Para Bebés (Parenting)
- Libro-CD ¿Te acaricio el alma?: con preciosas canciones para acompañar el masaje, como puedes ver en este vídeo.
- Y, por supuesto, el capítulo 4 de nuestro libro «Bebés en Movimiento: Acompañamiento del Desarrollo Psicomotor, Sensorial y Postural de tu Bebé», está exclusivamente dedicado al masaje y juegos para realizar con tu bebé.
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